Skip to main content

Las últimas tendencias agroalimentarias se posicionan, cada vez más, en pro de la liberación de compuestos químicos. No solo productores y distribuidores, sino también la demanda de los propios consumidores empieza a inclinar de forma muy evidente la balanza hacia los productos orgánicos y libres de toxinas y químicos. Así, el vapor seco se presenta como la alternativa óptima en el sector. Y ello, debido a que supone un tipo de limpieza muy eficiente y que se realiza libre de derivados químicos.  

En efecto, el vapor seco se genera a partir de agua sobrecalentada y presurizada. Ésta produce una rápida evaporación que, al estar libre de químicos, no es tóxico. Es, por tanto, una alternativa muy adecuada en cuanto a programas de limpieza ecológica. Y no solo por ser libre de tóxicos, sino por su alta efectividad. De este modo, la limpieza mediante vapor seco a 160º supone un potente agente desinfectante y esterilizante con un bajo consumo de agua. Además, al no haber partículas de agua en suspensión, permite tratar de forma segura las superficies sensibles. Por ejemplo, las que tienen contacto directo con alimentos. 

Por ello, la limpieza con vapor seco es muy usada en cintas transportadoras y cámaras frigoríficas. También ha tenido un importante papel para impedir la propagación y circulación del coronavirus, además de eliminar gérmenes, bacterias y microorganismos.  

En Integra llevamos más de 7 años realizando este tipo de intervenciones, garantizando así la esterilización de superficies para el sector alimentario y sanitario. Para ello empleamos una gama de maquinaria certificada, entre la que se encuentran nuestros generadores de vapor, que trabajan a 160º, dando garantía de desinfección térmica a nivel de esterilización.